Tercer Domingo Del Tiempo Ordinario

26 de Enero de 2019

TEXTOS BIBLICOS PARA LA LITURGIA EUCARÍSTICA

Isaías anuncia una mañana de luz y de alegría. Jesús nos trae la luz verdadera con la buena noticia, y la llamada a seguirle. Y es Pablo el que pone la fuerza de esa luz no en los alores humanos, fuentes de división, sino en el mismo Cristo, fuente y signo de unidad.

 

ORACION

Oh Dios, padre nuestro, nos reunimos en medio del fío invierno para alabarte y darte gracias, y hoy, una vez más tu Hijo Jesús nos comunica el evangelio de tu reino. Haz, Señor, que esta nuestra comunidad reciba tu luz y la refleje, de modo que podamos iluminar la oscuridad del mundo. Por Jesucristo nuestro Señor. Amen


PRIMERA LECTURA: Is 8:23-9:3

Israel, desterrado, soporta la humillación pero abre su corazón a la esperanza. El mañana será mejor; el horizonte tiene colores de victoria, de paz, de libertad. Esta lectura es un mensaje para todos los que sufren sin perder la confianza en Dios.

 

SALMO RESPONSORIAL: Sal 27:1,4, 13-14

R/ EL SEÑOR ES MI LUZ Y MI SALVACION

 

  1. El Señor es mi luz y mi salvación, 
¿a quién temeré? 

    El Señor es el baluarte de mi vida, 
¿ante quién temblaré?. /R
     
  2. Una sola cosa he pedido al Señor, 
y esto es lo que quiero: 

    vivir en la Casa del Señor 
todos los días de mi vida, 

    para gozar de la dulzura del Señor 
y contemplar su Templo. /R
     
  3. Yo creo que contemplaré la bondad del Señor 
en la tierra de los vivientes.

    Espera en el Señor y sé fuerte; 
ten valor y espera en el Señor. /R


SEGUNDA LECTURA: 1 Co 1:10-13, 17

La Comunidad de Corinto está dividida. Algunos se dicen seguidores de Pablo, otros de Pedro. Pablo les recuerda que el único importante es Cristo y no aquel que lo anuncia. La auténtica fe lleva a la unidad y nunca a la división.


ACLAMACION DEL EVANGELIO Mt 4:23

Aleluya, aleluya Jesús pedicaba el Evangelio del Reino, curando las enfermedades del pueblo. Aleluya.


EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO Mt 4:12-23

El pasaje del evangelio de hoy nos habla del comienzo del anuncio del reino de Dios con obras y palabra. Jesús nos llama a “seguirle” y nos invita a trabajar juntos con El.

 

TEMA: «Convertíos, Venid y seguidme»


Seguimos los pasos de Jesús y es que ESCUCHÁNDOLE queremos aceptar la invitación que Dios-Padre hacía el día del Bautismo de Jesús. Los domingos anteriores nos han “presentado” a Jesús: era el anuncio del profeta; era Juan, al Bautista, en el Jordán; o era el mismo Dios: “es mi Hijo predilecto”. Hoy es el mismo Jesús el que inicia su MISIÓN, la de anunciar y realizar la Buena Noticia del REINO de DIOS, “curando las enfermedades y dolencias del pueblo”.

Pero ese Reino de Dios no se va a imponer por la fuerza; no es éste el modo de proceder de Dios. De ahí que Jesús precisa de personas que ESCUCHEN su doble invitación:

convertíos, porque está cerca el Reino de Dios”

venid y seguidme, y os haré pescadores de hombres”.

Cuando alguien ESCUCHA su LLAMADA y su INVITACIÓN y comienza a seguirle (porque va sintiéndose bien con Él), entonces se realiza lo proclamado en la primera lectura: “el pueblo que caminaba en tinieblas vio una gran luz”. Así es Jesús: ILUMINA, DA SENTIDO, CAMBIA la VIDA de sus seguidores, y, de este modo, éstos colaboran en la misión que el mismo Señor les propone.


 

 

 

 

¡Dichosos y dichosas
los COLABORADORES y las COLABORADORAS
en la MISIÓN de Jesús!