See other templates

 

Conducido Por El Viento Y Por El Espíritu Santo

(Juan 20;19-31)

 

El viento sopla hacia donde quiere. Aunque lo escuches, no sabes de dónde viene ni a dónde va.” Dijo Jesús a Nicodemo.

 

La palabra griega “Pneuma”, tiene dos significados; “viento” y “espíritu”. Jesús da los dos sentidos a esta palabra, cuando dice “viento”. Es decir, el hombre es guiado por el viento y por el Espíritu Santo.

Se me viene a la cabeza una canción que escribió un cantante y autor de canciones llamado, A. Yupanki.

Camino, el camino me trajo hasta las montañas de Tucuman.”

Este camino es como el viento del evangelio. El hombre camina constantemente por los caminos de la vida que está lleno de sorpresas. Mientras recorres la vida, llegas sin darte cuanta a las montañas de Tucuman.

Hay momentos en la vida que aunque sabes a dónde quieres ir, de pronto ocurre algo inesperado como el corona virus y la vida te lleva a unas montañas parecidas, apartadas de tu rumbo y tus sueños, sin darte cuenta. La vida es lo que sucede mientras esperamos que suceda otra cosa. Es importante saber andar con suavidad, sin resistirte al viento.

Pero al mismo tiempo, debemos obedecer al viento que es el Espíritu Santo. No debemos fijarnos en que el camino pueda ser empinado o que esté húmedo, sino caminar dejándonos guiar por el Espíritu Santo, como Jesús y con Jesús.

Dejándonos guiar por el viento y por el Espíritu Santo, podremos seguir el viaje de la vida con una postura flexible y fiel.

 

 

J. Garralda

 

 

002178552

Te esperamos en el Centro Loyola

Actividades del Centro Loyola

Volver